Hay una pregunta que todo ser humano se hizo alguna vez: ¿Por qué el mundo es una letrina, por qué estamos como estamos?¿Porqué hay guerras, bombas nucleares, maestros rompiendo los huevos por aumento de sueldo, contaminación ambiental, prostitutas que cobran una fortuna, políticos corruptos y adolescentes con arito en la lengua? ¿Para qué hay tantas religiones, por qué no hay ricos en la cárcel, por qué te salen pelos en el culo y en la nariz y no en la cabeza donde te hacen falta, para qué carajo existen las caries y las hemorroides? ¿Por qué hay tantos divorcios, hambrunas y pobreza, por qué los chinos siguen cogiendo, etc., etc? ¿Por qué todo esta tan mal en este maldito planeta? ¿POR QUEEEE?
Y la respuesta a todos estos problemas podemos encontrarla hace unos 3.500 años atrás… Exactamente cuando el barbudo Moisés bajó del Monte Sinaí con las tablas que contenían los mandamientos.
En aquella oportunidad Dios conversó con Moisés:
- Hola San Pedro ¿Cómo estás muchacho?
- Dios, no soy San Pedro, soy Moisés.
- Ahh disculpa!! Es que desde aquí arriba no te veo bien (¿que gracioso no? Si Él lo ve todo). Lo que pasa es que tenés la barba tan larga como la de él.
- Si, Dios perdóname. Lo que pasa es que vengo con mi pueblo de cruzar por el Mar Rojo y la verdad es que no tuve tiempo de afeitarme.
- ¿Te gustó que te haya dado el poder para abrir las aguas y cruzar con todo el pueblo hebreo no?
- Si Dios, la verdad es que me hiciste quedar como un capo ante todos ellos. Te debo una.-Bueno, cambiando de tema, te doy estas 2 tablas para que toda la humanidad conozca y respete los 20 mandamientos que ahí escribí.
- Uhh!! ¿Y voy a tener que cargar esas dos tablas de piedra yo solito?. ¿No es más fácil que memorice los 20 mandamientos?
- A las palabras se las lleva el viento mi querido Moisés. Es por eso que te estoy dando estas piedras. Mi deseo es que se las enseñes a toda la humanidad.
- Esta bien Dios. Hablaré con la humanidad y si es necesario les explicaré mandamiento por mandamiento hasta que los entiendan. Pero tengo una duda…
- Noooo Moisés, no intentes hacerme esa broma…
- No, no!! Tengo una duda en serio, o sea…¿por qué tantos mandamientos?
- Y bue…¿acaso querés que escriba 10 y el mundo sea un soberano kilombo?- Perdón Dios, es solo que me parecían muchos…
- Ustedes los humanos siempre tratando de simplificar las cosas. ¡¡Anda y hace lo que te pido por favor!!.
- Ok. Cómo tú digas Dios.
- Y otra cosa Moisés…
- ¿Si Señor?
- Para nuestra próxima reunión te quiero afeitado ¿ta?
- Si, me afeitaré, te lo juro por vos.Y así, Moisés bajó del Monte Sinaí con las dos tablas que contenían 10 mandamientos cada una, o sea 20 en total. Pero tuvo la mala suerte de pisarse su larga y tupida barba y una de las tablas se le fue de las manos, quebrándose en mil pedazos.
- La gran p... que te parió –maldijo Moisés…¿Y ahora qué hago?...Ma sí...digo que son 10 y listo!!
